Volbeat en Teatro Teletón: Una inyección de energía a la vena
15 de marzo 2018.
Por Nicolás Morán.
Fotografías por Francisco Medina (Lotus Producciones)
Como antesala del Lollapalooza de este 2018, se presentó en el Teatro Teletón, la agrupación danesa de heavy metal que mezcla rock and roll y punk, y que la rompe desde el 2001, deslumbrándonos con la energía que nos llevó hasta lo más profundo de las heladas tierras del norte europeo, mostrando porqué están invitados a la fiesta de 3 días que se vivirá en el Parque O’Higgins este fin de semana, en una presentación que podríamos catalogar de intensa medicina, porque sin duda, en plena semana, tomarse un tiempo para presenciar un espectáculo de semejante calidad, es uno de esos lujitos que pocos pueden darse, más aún si consideramos que se nos viene un festival que solo cosecha éxitos.
Debemos señalar la devoción que profesa el fan del Volbeat, porque la fila se extendía por cerca de unas 2 cuadras y que estuvo atenta desde las 19, así que para cuando abrieron las puertas a eso de las 19:40, ya habían más de 300 personas formadas esperando entrar al teatro, que tuvieron que esperar 2 horas más para poder ver a los metaleros. Así que nos queda claro que los seguidores de la banda, tienen una voluntad y paciencia envidiable.
Cuando ya eran las 21:30, y los asistentes no daban más de la emoción y la ansiedad, los exponentes de Dinamarca se hicieron presentes con la canción “The Devil’s Bleeding Crown”, que llenó y electrificó el teatro con sus riffs, para dar paso a los saludos correspondientes de la banda con el público y viceversa. La energía que transmitían, permitía que se dieran los lujitos de juguetear con el público, “darles los 5” a los que estiraban la mano, y su vocalista, Michael Poulsen, gritar “¡Viva Chile, mierda!” en medio de los aplausos de un Teletón lleno hasta los bordes.
El show, si bien era sencillo, es decir, los músicos con sus instrumentos, y un telón con su nombre, muy al estilo de tocata old school, sin grandes aspavientos y apoyos visuales, lograron hacer cabecear a todos y cada uno de los presentes, puesto que contaban con la batería de Jon Larsen, que conseguía hacernos sentir el poder escandinavo, que mezclado con el poderoso bajo de Kaspar Boye Larsen nos hizo retumbar con las vibraciones y una melodía que sonaba exquisita en el recinto santiaguino. Es por esto que esa combinación de carisma, una voz increíble, buenas canciones, buen humor y sonido impecable, hizo de la noche una entrada en el festín que es Lollapalooza, ergo, los fans pudieron disfrutar de una jornada larga, que fue un popurrí de diversos discos desde algunos más antiguos como Guitar Gangsters & Cadillac Blood del 2008, hasta el último, Seal The Deal & Let’s Boogie, estrenado el 2016.
El concierto siguio su curso, y la noche salía a pedir de boca, porque le dieron en el gusto a los fans tocando puras “sandías caladas”. Temas como “Lola Montez”, “Seal the Deal” o “A Warrior`s Call” hicieron que hirviéramos de emoción, pero creo que uno de los momentos más entretenidos fue cuando en una actitud muy rockabilly, adoptó la posición de los años 50 y empezó a imitar al gran Johnny Cash, cosechando los vítores de la gente, tocando como intro “Ring of Fire” para dar paso a su canción “Sad man’s tounge”, y otro momento que consideramos memorable, es que en vivo nos presentó una canción nueva, “The Parasite”. La canción tiene un sonido interesante, que en realidad no se aleja mucho del estilo al que estamos acostumbrados a escuchar por parte de los daneses.
Luego de cerca de una hora y media, cerraron la primera parte con “For Evigt”, y como era de esperar, el público no se quedó tranquilo, y bramaron por el regreso del grupo al escenario. Sus plegarias fueron escuchadas y los nórdicos subieron otra vez para tocar 3 canciones más, que entre la adrenalina y un par de mosh bastante decentes, en comparación a otros que hemos visto, concluían lentamente una noche para el recuerdo, hasta que, en una acción temeraria, invitaron a subir al público en “Still Counting”, y tocaron entre los jóvenes que, enloquecidos, cabeceaban y agitaban sus guitarras imaginarias, mientras Volbeat desplegaba el fin de su concierto. No hay como negar que fue una presentación redonda, porque el audio estuvo estupendo, la puesta en escena estuvo aún mejor, y por sobre todo, el aguante de la gente fue recompensada con el as bajo la manga de haber podido compartir con su grupo sobre el escenario. Si es que alguien va al Lollapalooza, esa presentación le va a parecer insípida, porque los daneses dieron todo y mucho más la noche de ayer.
Setlist:
The Devil’s Bleeding Crown
Radio Girl
Heaven nor Hell
A Warrior’s Call
I only wanna be with you
Lola Montez
16 Dollars
Sad Man’s Tongue
Doc Holliday
Let It Burn
Seal the Deal
Slaytan
Dead but Rising
Fallen
The Parasite
The Lonesome Rider
Hallelujah Goat
For Evigt
Encore:
Black Rose
Maybellene I Hofteholder
Still Counting