La carrera artística de Rafah González avanza su vuelo tras un intenso despegue. Con determinación y habilidad, el rapero de Maipú ha posicionado su nombre en la escena entre las promesas de las nuevas generaciones, destacando por su versatilidad y vanguardia en cuanto a ritmos, pero principalmente por el compromiso con el mensaje en sus contenidos, los que cuidan y defienden la esencia social del rap chileno.
A fines del año 2019 estrenó Pingüécula, coincidiendo este primer lanzamiento con el estallido social en Chile. Si bien el EP no se inspiró directamente en la revuelta popular, muchas de sus canciones retratan las razones que gatillaron el inminente colapso, como “Malos?” o “Basado en $hile”, lo que involuntariamente le brindó una favorable recepción a su debut a pesar del complejo contexto. Desde entonces se ha mantenido activo con singles como “Coronavirus de Chile”, “8P”, “Akiraka” y su más reciente “Suelta”.
El día de hoy Rafah González regresa para presentar Rap To The Future, su segundo lanzamiento discográfico, el cual está compuesto por tres canciones producidas por Dbane en Vola Records. En este episodio, Rafah desenvuelve sus rapeos en estructuras como drill o doble tempo, con un mensaje que busca reivindicar la vigencia y calidad del género entre las generaciones actuales.
“Rap To The Future es mi forma de responder cuando dicen que el rap pasó de moda o que está muerto, cuando en realidad somos muchas personas quienes seguimos en esto. El título hace referencia a la película “Volver al Futuro”, uno de mis clásicos favoritos, ya que el rap es pasado, presente y futuro para mí, por lo que nunca va morir mientras yo lo siga haciendo.”
El EP se encuentra disponible en las principales plataformas digitales y su estreno se acompaña con el vídeo clip del single “88 millas” (dirigido por Diego Bastías), el cual cuenta con la colaboración en barras de Nera Baby, otra promesa que se abre camino, y con quien firma una auténtica declaración generacional de la nueva era del rap en Chile, invitando a fortalecer la cultura y dejar atrás actitudes obstaculizan el desarrollo de la escena.
“Quise tocar temas más personales, vivencias y pensamientos que he tenido últimamente, así como también tirar algunos palos a los raperos más puristas que se ahuyentan cuando digo que también soy rapero solo porque no sueno boom-bap, o a la escena actual de artistas más pegados, donde las letras están llenas de contenido que separa al barrio en vez de unirlo.”