Nicole celebró sus #27añosdecanciones en Teatro Cariola: Un viaje infinito
15 de octubre.

Por Sofía Portilla.
Fotografías por Víctor Santibañez.

Una eléctrica y femenina Nicole pudimos escuchar en vivo ayer, sábado 15 de octubre, en el Teatro Cariola para celebrar #27añosdecanciones y cerrar el tour que emprendió hacia los Estados Unidos desde mediados de este año. Este show fue uno muy especial porque aparte de finalizar el tour en casa -como se debe-, fue uno de los últimos de la cantante de este año para celebrar sus 27 años de trayectoria, donde el formato del concierto fue una pincelada perfecta de sus éxitos de siempre, que se resumió en 27 canciones.

Con un fondo que hace alusión a su último disco, “Panal”, y acompañada de cuatro músicos, Nicole dio inicio al recital anoche a las 21 horas y terminó alrededor de las 23:15. La lluvia no fue problema alguno y el Cariola se llenó para cerrar este ciclo con la artista, quien estuvo acompañada de su familia desde el comienzo.

“Pequeñas cosas buenas” dio el pie inicial a una noche llena de magia, seguida por “Panal”. Al término de esa canción, Nicole agradeció al público y obtuvo la respuesta de alguien muy especial, su pequeña hija Celeste, quien gritó “¡gracias a ti, mamá!”, despertando la ternura de los asistentes.

“Románticos” y “Despiértame” se encargaron de calentar los motores para corear fuerte “Todo lo que quiero” y aplaudir a una talentosa artista que se lució con la guitarra eléctrica desde esa canción en adelante hasta “Noche” o, más conocida como “Gotas de miel”, porque la cambió por una electro-acústica.

Lo especial de Nicole, a diferencia de varios artistas, es su cercanía con el público. Los hizo parte desde el comienzo, dirigiéndose a todos agradecida con esos gestos dulces -cuando levanta los hombros sonriendo- como una pequeña niña. Ella tiene la facilidad de transmitir, de hacer también protagonistas al público y escucharlos cantar a capela dándose el tiempo de escuchar la ovación y, sin duda, las dulces intervenciones de sus pequeños hijos.

Un juego de luces azules le dio el pase a “Solo el mar”, canción que contiene un ritmo muy pegajoso y relajado, una de las clásicas de la artista. Los asistentes se adueñaron de ella de comienzo a fin. Luego, fue el turno de una canción que hace mucho no tocaban en vivo y, transformó el ambiente de un segundo a otro -por los juegos de colores más oscuros-: “Si vienes por mí”, seguida por “No somos extraños”, “Culpables” y “Baila”.

Se formó una atmósfera exquisita cuando Nicole se refirió a la composición de la canción “Cuando”, escrita por ella tomando como inspiración a su marido: “Esta es una canción de amor, del primer momento que conocí al amor de mi vida, y que espero reencontrarme con él en las siguientes”.

Con un gran ‘salud’, la cantante de 39 años introdujo un par de canciones que nos llevaron a un “Viaje infinito”, como el nombre del 4to disco de ella, con las canciones “Vida” y “Viaje infinito”. Luego, un potente Cariola se hizo escuchar para corear “Dame luz” junto a la artista.

Así comenzó la segunda parte del show, una más íntima, que tuvo como invitados a dos artistas nacionales para presentar una versión acústica de “Tal vez me estoy enamorando” y “Lágrimas de sal”, donde Héctor Palma (ex participante de The Voice) se lució en un dueto perfecto con su ex coach.

El mágico show finalizó con “Hoy”, canción que mantuvo a todos eufóricos entre gritos, saltos y baile. Esa noche Nicole demostró una vez más su gran calidad como artista, el motivo por el cual fue invitada a una Master Class en Berklee en los Estados Unidos y por su sencillez de siempre, siempre será un honor verla en el escenario.

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