Lacrimosa en Teatro Cariola: una tarde entre sombras germanas
27 de marzo 2019.

Por Rodrigo Guzmán.
Fotografías por Javier Martínez.

Existen conjuntos cuya fanaticada se mantiene fiel a lo largo de los años sin importar el mandato del mercado o la moda. Fue allá, a mediados de la década del 2000, donde Lacrimosa reventó cada pista de baile colmada de chicas y chicos góticos en las discotecas de moda de la capital. El Teatro Carrera, en su tercer y último piso, fue testigo de la adoración que el conjunto de Tilo Wolff despertaba en el pecho de los más pálidos asistentes al mítico recinto de Alameda. No cabe duda: más de alguno estuvo presente anoche, pues, a decir verdad, el show que Lacrimosa brindó en Teatro Cariola se asemejó más a una procesión tutelada por un guía espiritual que a un concierto de rock.

La presentación de los alemanes estaba pactada para las 20:30, en una fecha que prometía más de dos horas y media de música cuyo itinerario visitaría los más grandes éxitos de Wolff y compañía. Luego de un breve retraso, que los asistentes notaron y no perdonaron, Lacrimosa salió a escena a eso de las 21:00 hrs. Antes de interpretar cualquier corte, los alemanes dejaron proyectar una serie de imágenes sobre una pantalla, situada al fondo del escenario, tal como la costumbre lo dicta. Desde ella, surgieron cuadros con motivos cósmicos que se intercalaban con el rostro de Tilo Wolff y Anne Nurmi una y otra vez, sugiriendo así desde un principio lo que sería la esencia de la presentación de Lacrimosa: una mezcla entre sonidos que evocaron el Espacio exterior junto a melodías melancólicas que apelaron al espacio interior del individuo que oye.

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Tras la breve presentación, Wolff y compañía subieron al escenario entre vítores exaltados para interpretar “Komet” sin mayor preámbulo. Si toda la presentación de Lacrimosa tuvo un marcado espíritu cósmico, este se vio vigorizado aún más gracias a los teclados de Anne Nurmi, quien llenó de épica los cortes que el conjunto proporcionó. Tras esto, vino la interpretación de “Nach dem Sturm”, que desató el arrebato generalizado del público asistente. Esta dinámica se mantuvo a lo largo de toda la presentación de los germanos que a la vez se vio dominada por la omnipresente figura de Tilo Wolff, proyectada una y otra vez sobre la pantalla tras la banda. En este sentido, es imposible no advertir la especie de culto a la personalidad que tanto los seguidores de Lacrimosa como el conjunto mismo practican, pues sin necesidad de ser un frontman que desborda carisma, Wolff fue idolatrado en todo minuto por la audiencia, quien manifestó su fanatismo con fibra intensa a lo largo del show.

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Tras esto, vino la interpretación de temas como “Schakal”, “Not Every Pain Hurts”, “Alleine Zu Zweit”, “Durch Nacht und Flut” y “Seele In Not”, que sonaron correctamente mientras todo trascurría entre la nostalgia y la oscuridad. En un par de ocasiones, Wolff cedió su centralidad en las vocales, tomando dicho lugar Anne Nurmi. A pesar del entusiasmo que esta suscitó, no puede dejar de mencionarse que la voz de Nurmi tendió a desaparecer entre el barullo instrumental. De no haber sido por los gritos y alzas de voz algo extremadas, la performance vocal de la finlandesa hubiera sido más bien inaudible. Con todo, el publico disfrutó de manera intensa la propuesta de Lacrimosa, quienes alternaron de manera muy equilibrada cortes más bien sosegados junto a otros algo más potentes. Este fue el caso de uno de sus temas más aclamados, pues “Copycat” fue interpretado con potencia ante un público que al parecer deseaba sobremanera escuchar dicho corte.

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Tras dos horas y media de concierto, los alemanes llegaron a confirmar que lejos de ser un conjunto que ha visto caer en el olvido su legado, son un colectivo que mantiene viva una esencia noventera y oscura, tan propia de aquellas latitudes y que, tal como se vio anoche, mantiene una recepción holgada y entusiasta entre los seguidores del sonido más sombrío y melancólico que la tierra de los nibelungos puede dar.

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Setlist:
Komet
Nach dem Sturm
Schakal
Not Every Pain Hurts
Der Morgen Danach
Alleine Zu Zweit
Satura
Bresso
Seele In Not
Die unbekannte Farbe
My Pain
Durch Nacht und Flut
Stolzes Herz
Ich verlasse heut’ dein Herz

Encore:
Im Schatten Der Sonne
Thunder and Lightning
Feuer

Encore 2:
Copycat
Alles Lüge

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