La Banda del Bisonte emergió en 2018 con un debut discográfico potente y emocionante que lleva por nombre Memorias, un título que tiene sentido si tomamos en consideración que la agrupación está compuesta por los hijos de un parche universitario que los antecede por décadas en un lazo fraterno y honesto. Años de creación y ensayo le han dado a este proyecto antioqueño la posibilidad de crear una música coqueta y sofisticada que bebe del indie mundial para crear una estética urbanita, explosiva y refinada. El sonido de La Banda del Bisonte no se parece a nada que hayamos oído y rápidamente se han convertido en uno de los referentes centrales del indie paisa, dando forma a composiciones emocionantes y emotivas que sus fanáticos cantan a voz en coro durante cada presentación. Ahora, después de un año lento para los medellinenses en el que, sin embargo, presentaron un EP maravilloso de nombre El escondite de los que nada tienen y de su colaboración con La Muchacha en “Nómada”, La Banda del Bisonte regresa con “Fantasmas de hielo”, un corte emocionante que cristaliza la influencia de Metric y The Bravery y para el que colabora el quinto en pleno.

“‘Fantasmas de hielo’ es una de esas canciones que nacen espontáneamente. Inicialmente, nos reunimos a crear y componer en una finca en Copacabana, Antioquia, porque era el punto en el que podíamos estar tranquilos y seguros con la situación actual de pandemia. Allí ya habíamos hecho nuestro sencillo ‘Nómada’”, explica la banda sobre la génesis de la canción. “Subimos pensando en hacer varias canciones del nuevo disco, pero ‘Fantasmas’ fue de esas que salen fácilmente, con fuerza y alegría. Teníamos una idea que Simón había propuesto que luego fue mutando con un nuevo riff de guitarra de Otto, pensando en que él tocara guitarra en esta canción también. A partir del riff de Otto salió un puente, y un corito vocal que todos cantamos, mientras Miguel y Daniel construyeron la letra de una idea que Miguel había llevado, una metáfora de “la sombra que un relámpago quebró” a raíz de eso y con la mezcla de sentimientos se construyó la canción con base en el olvido, el amor y sus decepciones, entre otros asuntos. La canción se volvió mucho más rockanrolera y mutó con mucho poder que se siente con guitarras más distorsionadas, un solo de guitarra extenso y divertido, un bajo riffsudo que se entiende con la batería. Un discurso dentro de los nuevos contextos del rock que toca la nostalgia y el amor con riffs clásicos de rock, una nueva etapa de La Banda del Bisonte muy prometedora”, concluyen.

Sobre la marca de los cuatro minutos, La Banda del Bisonte construye un esfuerzo coral en el que brillan las armonías de guitarra como eje sobre el que gira el resto de la mezcla. Jugando con voces enérgicas como ecos a la composición, el quinteto paisa da forma a una melodía que evoluciona, crece y muta entre programaciones delicadas y reverbs. Sosteniendo la mezcla aparece una batería sincopada y un bajo calmo que sostiene el cuerpo cortopunzante de las guitarras. La canción fue grabada y producida en el Alto de Medellín, junto al productor Juan Diego Galvis, dándole a la composición un aire nuevo que destaca en medio del catálogo de los bisontes. Sin embargo, siempre hay espacio para la épica del solo rocanrrolero, permitiendo que la canción tenga una fuerza heroica hacia el final del corte, justo antes de desvanecerse en el éter del olvido. Acompañando el lanzamiento llega un lyrc video en blanco y negro que muestra a la banda en el proceso de grabación y producción de su nuevo tema. Con “Fantasmas de Hielo”, La Banda del Bisonte se prepara para abrazar un nuevo sonido y una identidad musical cada vez más propositiva y avezada.

En esta nueva etapa que plantea La Banda del Bisonte, sus cinco miembros colaboran y aportan a la creación de canciones, dándole a su propuesta la sólida identidad de un colectivo. Así, La Banda del Bisonte se prepara para un álbum próximo con un sencillo que marca una nueva línea en su estética rockera, jugando con más sonidos del pasado y el futuro para crear piezas de rock atemporales y emocionantes. «Fantasmas de Hielo» marca el primer momento de muchas composiciones maravillosas que vendrán.