Tras 12 años (Pequeños crímenes conyugales), la dupla de actores se reencuentra en escena con la versión local del laureado texto original de Llüisa Cunillé, Premio Nacional de Literatura Dramática en España. El relato, que se inspira en un encuentro casual en un hotel en Kinshasa, República Democrática del Congo, aborda la invisibilidad que sufren personas condenadas por la miseria y la explotación, podrá verse a partir del próximo 24 de noviembre en Teatro Mori Bellavista.
Cuando el dictador congolés, Mobutu, abandonó su país tras ser derrocado (1997), pronunció la frase “Après moi, le déluge” (“Después de mí, el diluvio”). Esta sentencia es recogida por la catalana Llüisa Cunillé para dar pie a la sutil ironía con la que plasma, a través de un sensible relato, la tensión entre solidaridad y explotación, riqueza natural y miseria de la población, que evidencian lugares como la República Democrática del Congo y que la autora toma como punto de partida para abordar el tema central de su obra: el destino de los niños de la guerra, las seculares miserias de los países ricos en recursos frente a la explotación colonialistas antes y las transnacionales ahora.
En la habitación de un hotel de Kinshasa se encuentran un hombre y una mujer. Él, un empresario europeo que trabaja para una compañía sudafricana que se dedica a la extracción y comercialización del coltan (este mineral, indispensable en toda la tecnología actual, ha desencadenado las más cruentas guerras, encubiertas bajo las llamadas guerras tribales). Ella, también europea, vive hace años en el país desempeñándose como intérprete. En esta ocasión será la voz de un tercer personaje (que no se ve en escena) y que lucha por conseguir a cualquier precio salvar a su hijo de un destino terrible.
“La estructura del relato, la fuerza con que la escritora instala la presencia de un personaje que no está físicamente, que no vemos, pero que crece y se revela como protagonista, la convierten en una de las obras más novedosas y emotivas del teatro contemporáneo. Es una historia sobre la desigualdad, sobre la urgente necesidad de ver a los invisibles, aquellos que no consideramos, pero que están a nuestro lado y que sufren la condena de vidas ya prefijadas por la explotación y la miseria; es una obra, en definitiva, sobre la conciencia, la mala conciencia”, explica Alejandro Castillo, quien además dirige este montaje.
La puesta significa también su reencuentro en escena con Katty Kowaleczko. Tras la exitosa experiencia que tuvieron en 2005 con Pequeños crímenes conyugales, la dupla creativa coincide ahora en Después de mí, el diluvio (Après moi, le déluge), que se estrena el próximo viernes 24 de noviembre en Teatro Mori Bellavista.
“La simpleza con la que fue escrita esta obra, la hacen bella y que su historia pase directamente a los sentidos, permitiendo que el espectador acompañe el viaje muy fácilmente. Es una obra que, si bien pasa en África, en un lugar tan distante de nosotros, toca un tema que es universal y que son las personas que no se ven, la gente invisible, marcadas por un destino, que no tienen oportunidades y sobre las que nadie parece hacerse cargo. La forma en que se concentra el verbo permite un despliegue del imaginario, por parte del espectador, lo que la transforma en una pequeña joya teatral”, agrega la actriz.
COORDENADAS
Después de mí, el diluvio
25 de noviembre al 17 de diciembre
viernes 21.30h, sábado 20.30 h, domingo 20 h
Teatro Mori Bellavista
Constitución 183, Providencia.
Valores: viernes $8.000 y sábado $10.000 general
Descuentos sobre valor general:
50% Zona Entel
40% Banco de Chile (pagando con tarjetas)
40% Club Viva de Vida Security
40% El Mercurio (pagando con tarjeta Club de Lectores)
30% El Mercurio (presentando tarjeta Club de Lectores)
30% Club Metrogas
FICHA ARTÍSTICA
Dramaturgia: Llüisa Cunillé
Dirección: Alejandro Castillo
Elenco: Katty Kowaleczko y Alejandro Castillo
Producción: Loreto Moya
Diseño integral: Jorge “Chino” González
Gráfica: Eduardo Cerón
Agencia audiovisual: FatMedia
Técnico audiovisual: Hugo Alfaro