Festival Maleza: Resistir Como la buena yerba
Hipódromo Chile, 22 de abril 2022.
Por Manuela Beltrán.
Fotografías por Francisco Aguilar A.
Dicen que la maleza es en realidad una yerba medicinal. Cuando crece libre en los campos es en realidad una “bienesa”, pero en las ciudades (del sur porque en la zona central ya no queda mucho pasto), usualmente se le intenta cortar de raíz por razones ornamentales de jardinería, sin embargo es sabido que esta siempre vuelve a crecer. “Resiste como maleza” era la leyenda escrita bajo las pantallas del escenario instalado en el Hipódromo Chile. Un mensaje que envolvió a las siete bandas que pasaron el pasado viernes 22 de abril por el escenario del Festival Maleza: Combo Tortuga, Vibración Eleva, Hacia La Victoria, Los Miserables, Sonora de Llegar, Molotov y Ska-P. Fue una soleada tarde y noche otoñal llena de energía, una hermosa celebración de equinoccio punk.
La Combo Tortuga abrió el evento, con cumbias que encendieron la partida de carrera del festival. La banda de Maipú, que el año pasado celebró diez años de carrera, sonó fuerte para la primera oleada de personas que llegaron temprano y que poco a poco comenzaban a llenar el recinto con sus poleras negras. Un poco más lejos del escenario cinco barras de bebestibles y un espacio de carritos de comida ya funcionaban a toda máquina.
La segunda banda del festival comenzó con bajos prominentes de psicodelia dub. Vibración Eleva describe con su nombre precisamente lo que transmiten a su público. La banda no escatimó en elevar el sonido con ritmos reggae, donde destacó el particular instrumento del saxofonista, un cruce entre clarinete y melódica cuyos solos agudos llamaron la atención de quienes estimulaban sus sentidos fumando. “¿Quienes son los que fuman marihuana?”, preguntó el vocalista de Vibración Eleva y muchísimas manos se levantaron en el público. Pausa. «Es la granja» corearon desde el escenario durante la canción “Planta Santa”. Otra yerba (como la maleza) condenada socialmente por abrir mentes y chocar con lógicas de productividad. No está lejos el día en que decaiga la estigmatización negativa de sus adeptos. Cada vez son más los países que la legalizan y reconocen su uso medicinal y recreacional. Detrás de imágenes de protesta social en las visuales y con mucha empatía el grupo se presentó y se despidió diciendo que vuelven al sur inmediatamente después de tocar. Cinco horas de viaje les tomó desde Concepción para llegar, así que saludaron a toda la gente que como ellos, tuvieron que trasladarse desde provincias para este concierto.
A continuación entraron marchando los integrantes de Hacia la Victoria, con cacerolas, silbatos y un cartel que decía “No se hagan los Larrys”, todos son sobrevivientes de violencia ejercida por carabineros, que quedaron con trauma ocular durante las protestas sociales del 2019 y 2020. La banda está conformada por César Galloso en voz y percusión, Sergio Totó Concha en voz y cuerdas, Vicente Pascal en voz, bajo y teclado, Gustavo Gatica en batería, Camilo “La Lágrima del Sol” Gálvez en voz, Rodrigo Lagarini en voz y acordeón, Miles Camus en cuerdas y Álvaro Silva en percusiones, entre otras personas que también están involucradas en el proyecto. Hacia La Victoria es memoria viva de un proceso revolucionario reciente, y su presentación fue una transmutación muy emotiva de dolor en arte, fuerza y resistencia. Entre canciones, relataron cómo se reunieron en una coordinadora y desde ahí conformaron el conjunto musical como una manera de apoyarse mutuamente desde el amor, para poder enfrentar aquella situación, contar al mundo lo que les pasó y visibilizar las injusticias que siguen ocurriendo.
Cada canción relataba una historia diferente de sus integrantes y a la vez todas entrelazadas. A coro se escuchó desde el escenario “Paco culiao, paco culiao, paco culiao” gritado y cantado como exorcismos para liberar la rabia de lo que pasó. “Rabia contenida, rabia social, es valida”, dijo uno de sus integrantes. Acompañaron en la presentación, una pareja de bailarines con vendas en los ojos, uno también es víctima de trauma ocular. El cuerpo como expresión artística también resultó muy emocionante, cuando el bailarín desenrrolló una larga cinta roja desde el ojo de su compañera, representando la sangre que se derramó en aquel sacrificio ocular de la revuelta. La cinta luego volvió a su función rítmica que recordaba la foto de la bailarina y el güanaco policial. Pero no todo fue rabia y tristeza en las canciones de Hacia La Victoria, también mucha esperanza como las letras que hablan de “Pobladores trabajadores que sólo quieren días mejores”. Y desde la audiencia se replicaron los gritos por la libertad a los presos y las presas de la revuelta, que desde hace dos años y hasta el día de hoy no pierden vigencia. El concierto fue dedicado a otro joven como ellos, Patricio Pardo, quien se suicidó recientemente debido a la impotencia y a la impunidad.
Cayó la noche y empezó el pogo. Los Miserables, se presentó con sus mejores éxitos, sonando fuerte y encendiendo al público desde principio a fin. Su presentación estuvo llena de símbolos que remiten a procesos importantes de resistencia y liberación. Con una bandera de Palestina amarrada al micrófono, camiseta del club chileno Palestino y una pelota que desde el escenario voló por los aires hacia el público. Pero no solo el fútbol como espacio de juego, liberación y transformación de realidades, también la gente que sufre por su tierra, e incluso “El gallo rojo y el gallo negro” que desde la revolución en España hasta el Chile de la actualidad cobra sentido. Así mismo con las “Adelitas” que fueron mujeres, agentes de cambio importantes en la revolución mexicana. Al final de su presentación Los Miserables también agradecieron y visibilizaron el esfuerzo de la gente que viene de provincia que llegó al festival, y de la gente que llegó temprano y que le toca siempre aguantar más.
Mención especial para la persona que hizo de DJ del festival Maleza y que puso música entre bandas. Desde temprano sonó una interesante selección que mantuvo la energía elevada y a la gente bailando y cantando todo el tiempo con temas como “Me estoy enamorando” de Inspector, “No somos nada” de La Polla Records, “1936, Un pueblo en armas” de Sin Dios, el cover de “Como te voy a olvidar” de Karamelo Santo, entre tantos otros hits de bandas como The Ramones, Los Prisioneros, Mano Negra, La Floripondio, Los Auténticos Decadentes y varios más.
El evento ya era una fiesta cuando empezó Sonora de Llegar. Fueron coreados por quienes los conocen bien, ya que la banda lleva más de veinte años sonando en este tipo de eventos tanto en Chile como en el extranjero. Y no les faltan los trabajos colaborativos como el reciente tema “Arder” que fue grabado con Aldo Macha Asenjo o los Anarkia Tropikal que también estuvieron presentes en el escenario del festival Maleza. “¡No más miedo, no más desinformación!” se despidieron gritando, “Viva Latinoamérica” remataron.
El Hipódromo Chile abarcó toda su capacidad, no hubo espacio frente al escenario para hacer círculos en grupo y poner mochilas adentro. Las dos bandas internacionales llenaron el lugar. Sus grandes canciones llevan años describiendo realidades complejas e injusticias de México y España. Revoluciones, resistencias, migraciones, racismos, iglesias católicas, etc. Letras y ritmos que resuenan en Chile y toda Latinoamérica por su universalidad, la historia común y cultura que entrelaza culturas.
Desde Mexico, Molotov comenzó su concierto con “Santo niño”, “Chinga” y “Amateur (Rock me Amadeus)”, pero no fue hasta que tocaron “una rola vieja”, como dijeron, que la gente se levantó en euforia. “Parasito”, “Here We Kum”, “Gimme the Power”, “Hit Me”, todos esos éxitos noventeros fueron coreados masivamente por el público. Algunos fueron recientemente revisitados en el Unplugged de Molotov, donde estuvo la chilena Anita Tijoux de invitada. La banda sonó tan fuerte con los dos bajos que tocan, que hasta las cámaras que les proyectaban vibraban. La banda tocó varios temas más nuevos, incluyendo sintetizadores con sonidos como de juego mexicano y en las visuales se veían la cabeza con la mano distintiva del grupo y consignas como “Libertad a todxs los presxs politicxs”. Los Molotov hablaron poco, pero introdujeron una canción en especial “Esta es una rola que habla sobre la frontera de Estados Unidos y México se llama Frijolero”. La canción más coreada de todas, quizás porque hoy adquiere un nuevo significado con la actual crisis migratoria en Chile. Sería una tragedia si el racismo que describe “Frijolero” escalara aquí como lo ha en los países del norte.
Las últimas canciones de Molotov menos conocidas para el público chileno fueron igual de ovacionadas. Interesantes despliegues por ejemplo en la canción “Marciano” que pasan de cumbia a punk subiendo exponencialmente la energía y haciendo saltar a todo el público. Era divertido escuchar entre cada canción al público pidiendo la canción “Puto” la cuál la banda dejó para el final.
Sin duda lo más esperado de la noche fue Ska-P. Con casi treinta años de historia, los madrileños no pierden energía ni consecuencia política arriba del escenario. De principio a fin, el público coreó todas las canciones, como en “Así soy”, una de las primeras canciones del concierto que dice “El pueblo vencido jamás estuvo unido, el pueblo unido jamás será vencido”. Siguiendo con “El Gato Lopez” la banda tocó con una energía exorbitante, como una verdadera fiesta punk, moviéndose los bronces por el escenario, yendo y viniendo hacia el frente. y luego con el tema “Mestizaje” que al igual que frijolero fue un grito colectivo antiracista.
La presentación contó con las clásicas performances satíricas en el escenario de la mano de Txikitin, que salió vestido de torero, cura endemoniado pedófilo, payaso Mc Donald y de rey de España en la canción “Jaque al Rey”; también toda la banda salió vestida de monjes franciscanos mientras un cuervo de alas negras vestido de obispo figuraba en el centro del escenario. Con gran disposición de visibilizar causas la banda elevó la bandera de arcoirirs de las diversidades sexuales LGBTQI+ en la canción “Colores”, así como la de Palestina que flameó desde el escenario cerca de la Mapuche en el público en el tema “Intifada”.
Desde el público se sentía mucha energía, se encendieron bengalas, se intentaron subir a las rejas, mucha gente en primera fila tuvo que ser evacuada por la trinchera del escenario. El concierto debió hacer pausas, en una oportunidad para que un hombre en silla de ruedas le pasaran sobre la reja y dos veces para que la gente diera un paso atrás para no seguir presionando, “me debéis una birra”, bromeaba el vocalista Pulpul en cada caso.
También hubo espacio para que luchadores sociales tomaran la palabra, la brigadista de Plaza de la Dignidad Daniela Sánchez, nerviosa pero segura de lo que decía, leyó un comunicado de los presos de la cárcel Colina 1, haciendo un llamado por su libertad. También hablaron dirigentes portuarios, Gustavo Gatica y “Totó” junto a Patricio Meza del grupo de apoyo a los presos politicos, también entregaron un mensaje por justicia y cárcel para Piñera.
Ska-P cerró la noche pasando por todos los clásicos de su repertorio, como “Legalización” “Mis colegas”, “A la mierda”, “El vals del obrero”. Hasta el tema nuevo “Estimado John” también fue coreado de memoria por el público. Desde la masividad de la gente en el público se levantó una nube de polvo que se levantó desde la tierra apenas húmeda por la primera lluvia del año que antecedió la noche del concierto. Entre pogos y saltos afloró la energía como todas aquellas yerbas que incluso con poca agua, crecen en espíritu y convicción, no envejecen y tal como la maleza, nunca mueren.
>>> REVISA NUESTRA RESEÑA FOTOGRÁFICA DE MOLOTOV Y SKA-P PINCHANDO EN ESTE TEXTO <<<
Hola ,
Veo su sitio web http://www.parlante.cl y es increíble. Me pregunto si las opciones de publicidad como publicación de invitados o contenido de anuncios están disponibles en su sitio.
¿Cuál es el precio si queremos anunciarnos en su sitio?
Nota: El artículo no debe tener ninguna marca como patrocinado o publicidad o similar y solo podemos pagar a través de paypal.
Salud
scarlet anderson