Club Hípico, 14 de Octubre 2023.

Por Ignacia Gutiérrez.
Fotografías por Creamfields Chile.

Este sábado 14 octubre volvió el festival de música electrónica más importante de Latinoamérica. En el Club Hípico de Santiago se llevó a cabo una nueva edición de Creamfields Chile. A partir de las 13 horas se abrieron las puertas para dar inicio a la jornada que se extendió hasta pasadas las 23 con un cierre espectacular para conmemorar los 18 años que se cumplen en esta versión desde la primera vez que se realizó el espectáculo en nuestro país.

Los asistentes pudieron disfrutar de un festival lleno de experiencias, con actividades, premios, zonas de descanso, juegos y 7 escenarios que albergaron a DJs como B Jones, Sam Feldt, KÖLSCH, Nicole Moudaber, Steve Aoki, Porter Robinson, Afrojack y Tiësto, los más esperados del festival y quienes se encargaron de hacer bailar y vibrar al público chileno.

Un caluroso y hermoso día acompañó a las más de 10 horas continuas de música y los más de 60 artistas que se distribuyeron en los diferentes escenarios. Con un line up, potente y prometedor con los artistas de cabecera internacionales, se les sumó parte de la producción local, artistas emergentes pero reconocidos como 5 Universos B2B, Ricardo Molinari y Felipe Venegas. El festival no solo se destacó por su prometedora parrilla de artistas, el diseño del lugar sin duda resulta ser, como en todas las ediciones, sorprendente. Desde el escenario principal, el Main Stage, montado con una serie de pantallas con luces led que se combinaron a su vez con videos, junto a juegos de láser y efectos especiales. A este le siguió la carpa Feral que, se mantuvo repleta durante todo el día, el Alternative, Cream, Neo, Chill Out, Grieta, y el auspiciado por Budweiser, los que tenían de por si su encanto propio.

A eso de las 14:20 de la tarde pudimos ver en el escenario principal el show de una de las solo dos mujeres que actuarían en el espacio más grande del festival. La española de 38 años, B-Jones, regresó a Chile tras consagrar su carrera internacional en su paso por Tomorrowland, dos años seguidos. Disfrutamos de su energía que se plasma en la combinación de EDM y house en cada remix que presenta, tuvimos también la oportunidad de conversar con ella. Para la artista jiennense, sobre ser mujer en la escena de la música electrónica señaló que: “mi truco secreto es que nunca me he sentido mujer en la cabina, me he dedicado a hacer música, que la gente baile y que el público disfrute”.

Nos dirigimos a la carpa y escenario Feral, donde con más de 20 años de carrera, en los primeros horarios de la tarde se subió a la tarima para dar inicio a su show el chileno Andrés Salinas, más conocido como Dj Wask. La carpa se mantuvo a tope con la gente bailando y saltando desde el principio al fin de la presentación del artista que se reconoce como exponente del techno, dejando claro que en Chile hay grandes exponentes de la música electrónica de vanguardia.

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Otro gran exponente de la música house que provocó la espera de la multitud se subió al Main Stage pasadas las 4 de la tarde, Sam Feldt, el holandés que ha sido destacado a nivel internacional colaborando con reconocidos artistas pop, se presentó por cerca de una hora con sonidos instrumentales y texturas tribales, su estilo de Deep house combinado con dancehall y tropical house mantuvo a los espectadores atentos a su presentación que mezcló con canciones de Cher y Dua Lipa, entre otras grandes artistas del pop.

Los platos fuertes de la jornada comenzaron a sonar a eso de las 6 de la tarde en el escenario principal, el primero en abrir las presentaciones de los frontlines fue el Dj Steve Aoki, el remezclador y productor estadounidense de origen japonés dejó claro quién ha sido el encargado de unir la música latina con la electrónica, en su presentación puso a bailar a los asistentes con remixes de canciones de reggaetón y pop. Y es que demostró que su energía casi no se agota, se subió a a tarima en varias oportunidades, dio saltos en el aire, terminó sin polera y mantuvo a la cancha repleta saltando, cantando y esperando su gran final. Como es conocido, esta vez Steve Aoki lanzó cerca de diez pasteles a las primeras filas, un cierre que mezcló las risas y la sorpresa de la gente.

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Luego de Aoki, llegó el turno de Porter Robinson, el artista, un poco menos conocido por el público chileno dio una gran sorpresa mientras anochecía en Santiago. Y es que dio cuenta el porqué de su reconocimiento a tamaño mundial, la mezcla de disco, música ambiental, new wave, orquesta sinfónica y dubstep lo ha consagrado como un artista con híbridos estilísticos impresionantes que dejó claro en el escenario. Con una notoria influencia por la música y la cultura japonesa,unas gráficas impresionantes que entre animé, naturaleza y colores lo acompañaron presentando también canciones de su albúm más personal, Nurture.

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Ya de noche, Afrojack transformó el escenario principal en una fiesta, con grandes visuales en rojo y blanco. La mesa de DJ es apropiada por quien dejó demostrado una vez más ser uno de los más famosos y destacados Djs del mundo de la electrónica, el público no muestra ni un poco de cansancio, baila de principio a fin la presentación de uno de los Djs que ha dado cuenta de su talento incursionado en los remixes de la electrónica con el pop y con el hip hop. El juego de luces que lo acompaña es impresionante, lasers que se proyectan a metros del escenario junto con las luces led que intercambian mientras se lleva a cabo la presentación consagran a quien domina las pistas de baile en todo el mundo.

La noche concluyó en el escenario principal, de la mano del DJ y productor oriundo de los Países Bajos, Tiësto. Un sorpresivo juego de luces con drones se encargó de entretener la espera, probablemente una novedad por primera vez realizada en Chile, dejando claro el nivel de producción del evento. Su segundo paso por nuestro país este año dejó claro una vez más de las razones que le han merecido premios Grammy y miles de millones de reproducciones en plataformas. La megaestrella global presentó sus más de 20 años de carrera, en los que ha realizado colaboraciones con Beyoncé, Coldplay, Kanye West, John Legend y Post Malone, Black Eyed Peas, Charlie XCX, Karol G y Bizarrap. Sus beats con sello propio colmaron el Club Hípico y a las miles de personas de todas las edades que llegaron para verlo tocar, nadie se quedó sin bailar o saltar. Demostró una capacidad enorme para entretener a las masas, los aplausos fueron totales, dejando en claro que sigue siendo uno de los referentes más importantes de la música electrónica a nivel global. Luego de un show de casi dos horas, y con fuegos artificiales en el cielo se fio por finalizada una nueva fecha memorable de este festival, que deja cada vez más altas las expectativas, las que logran superarse año tras año.