31 de marzo 2023.
Por Rocío Belen.
Fotografías por Javier Martínez.
CL.Prog, el festival progresivo del año, tuvo lugar la noche del 31 de marzo en el Teatro Caupolicán considerando un importante y contundente abanico de sonoridades dentro del género. La velada estuvo protagonizada por 5 exponentes que hicieron de ésta una verdadera explosión musical monumental, donde Desire of Pain, Mourner Laments, TesseracT, Alcest & Soen demostraron una vez más que el Prog es uno de los movimientos más vigentes del momento.
A pocos minutos de las 18 horas y con un Caupolicán poblandose abre la fiesta Desire Of Pain, banda nacional de Death Metal Progresivo Melódico que inicia fuegos con “Whisper of death” de forma pesada y con tonos bastantes agresivos, pasando a “Ascension” que explota las frecuencias bajas en su tope máximo dejándonos entrever mejor también esos tintes de djent oscuro que mezcla voces limpias con guturales dentro de una polirritmia ambiental bastante sólida. Le sigue “Memorias olvidadas” en crescendo constante, la cual también es parte de sus nuevas placas musicales. Cerrando con más poder, más guturales y más fuerza suena la canción “Vértigo” que además contó con un solo de saxofón, sorprendiendo gratamente a los asistentes que lentamente iban haciendo aparición en el recinto capitalino. Tras haberse presentado igualmente la noche anterior junto a TesseracT en Club Chocolate, los chilenos concluyen la primera parte de lo que sería una extensa y cargadísima jornada.
A eso de las 18:40 pisa el escenario Mourners Lament con ese Doom Death Metal que se asoma desde el underground para ver la luz en pleno Santiago Centro. Comienzan la presentación con “Slumbers” ambientando inmediatamente el venue con una atmósfera oscura, de la mano de algunos poco sutiles arpegios en melodías menores y disminuidas características del género. Le sigue “As Solemn Pain Profaned” también de su disco We All Be Given, manteniendo la oscuridad y solidez, sumando intensas distorsiones vocales a las piezas para posteriormente pasar a “Towards Abandonment”, canción que pertenece a las nuevas creaciones de la agrupación que saldrán a flote el segundo semestre de este año. Finalizan con la homónima “We All Be Given”, que da nombre al sello publicado en 2017 por los nacionales, cerrando una presentación acotada pero consistente y contundente.
La primera de las tres bandas internacionales protagonistas de este festival es TesseracT, quienes se presentaron la noche anterior al festival en un Club Chocolate repletísimo y totalmente vendido. El éxito de los ingleses era inminente. Con un inicio suave que detona rápidamente, se suben al estrado a las 19:30 en punto y suena “Proxy”. El metal matemático se hace presente con una buena dosis de Djent a la vena. Con una tremenda recepción del público pasan de inmediato a “Retrospect” mientras aún se calientan motores, sabemos que se viene largo. Con un Caupolicán casi a tope en su capacidad y una atmósfera amarilla ácido suena “Resist”, demostrando con creces lo profunda y cautivadora que es la voz de Daniel Tompkins. Algo que caracterizó a TesseracT durante esta jornada fue el uso constante de secuencias para acompañar las voces y añadir sintetizadores a las mezclas. Si bien cumplen su misión, a veces se hacía extraño escuchar voces o instrumentos que no estaban ahí, sintiendo a ratos que fue ligeramente abusivo el uso de pistas a lo largo de la presentación. Entre luces azules y rosa suena todo el groove de “Dystopia” con un sube y baja constante de vibraciones, pasando al poderoso inicio de “Smile”, dejando al desnudo las afiladas guitarras de Acle Kahney y James ‘Metal’ Monteith, y un reverb que maximiza la justa cuota de distorsión vocal del frontman. Continuamos con las clases de álgebra junto a “Arrow” y con un sólido paneo de cuerdas entre el guitarrista y el bajista Amos Williams abren paso a la racha conceptual de “Concealing Fate pt 1, 2 & 3”, donde el virtuosismo toca la puerta para no irse más. Con “Natural Disaster” podemos decir que el cabeceo estuvo intenso, lejos uno de los mejores breakdowns que tiene el progresivo moderno. En “King” suenan los riffs pesados, un juego en los toms de Jay Postones con una vibra un tanto sexy y luces estroboscópicas a tope. Para cerrar el capítulo, suena “Nocturne” mientras el público acompaña eufóricamente a los intercontinentales, finalizando después el set en seco con “Juno”, clásico coreado por los fans que se hacen notar sin miedo alguno.
TesseracT es definitivamente una banda maestra en su área, abarcando lo más crudo del metal progresivo moderno, sin decaer en ningún momento ni a nivel de ejecución ni vocalmente, mezclando lo antiguo con lo nuevo de forma equilibrada pero oscilante, una montaña rusa de escenarios musicales que te transporta constantemente entre lo actual y lo clásico.
Se cambia el telón para dejar atrás al teseracto y traer a la vida la quimera que protagoniza “Spiritual Instinct”, última pieza lanzada por la agrupación denominada Post Black Metal o Blackgaze. Con un Caupolicán ya repleto y siendo las 21 horas en punto Alcest se sube a escena e interpretan “Les Jardins De Minuit” cambiando drásticamente la atmósfera que se venía tejiendo. Continúan con “Protection” sonando orgánicamente impecables, apretadísimos. De inmediato retumba “Écailles De Lune pt. 2” creando mágicas ambientaciones que oscilan entre la dureza y la reverberación a punta de la Fender del frontman Stéphane “Neige” Paut y su mano derecha en las cuerdas Pierre “Zero” Corson. Volvemos al instinto espiritual con “Sapphire” donde los franceses no escatiman en lo más mínimo cuando se trata de pulcritud y limpieza sonora a pesar de las intensas distorsiones que mantienen expectante a cualquiera, y un doble bombo grueso en la vintage Ludwig de Jean «Winterhalter» Deflandre que mantiene el cabeceo constante. Tras un caluroso «olé olé olé olé Alcest Alcest», suena “Percées De lumière”, clásico del disco Écailles de Lune de 2010 que estabiliza ligeramente a la audiencia, donde Zero acompaña también de forma activa en las voces. Un poco más de olés y pasamos a “Souvenirs D’un Autre Monde”, homónima que da nombre a su disco debut de 2007, para saltar entre capas y capas hacia “Oiseaux de Proie” manteniendo el trance místico que caracteriza a los pioneros del Blackgaze. La vibra espiritual no da tregua y suena “Autre Temps” recordándonos la época de transición de la banda desde algo más oscuro hacia lo experimental, donde priman los cambios de ambientes y motivos por sobre la matemática progresiva. Con una breve intervención nos recuerdan la última vez que pisaron nuestro país hace 4 años, para pasar a la última sección del show. Suena eufóricamente “Kodama” haciendo retumbar los bajos de Indria Saray y finalizan la odiseica presentación con “Délivrance” junto a un cierre esplendoroso al unísono de la Fender de Neige haciendo acople con su Marshall.
La magnitud de esta presentación la describiriamos como la oscilación entre la dureza y la nostalgia, el goce musical absoluto desde lo empírico, desde el ideal, desde lo melódico y lo funcional. Alcest es la banda que nos demuestra que el progresivo es más que un género, es una forma de interpretación musical, y la noche del 31 de Marzo eso quedó más que claro.
Llega el momento de la verdad, ese que todos esperaban y que muchos se repitieron tras presenciar la presentación de Soen el pasado Martes 28 de Marzo en Club RBX donde notablemente re-versionaron sus propias canciones para dar una vibra unplugged al show. Son las 22 con 5 minutos y suenan las sirenas que nos alertan: El fin está cerca. Con un telón negro de fondo (porque pueden y porque no necesitan más) y a punta de euforia absoluta suena “Monarch” mostrando desde el minuto cero que la banda está totalmente sumergida en su commitment. ¡Cuánta energía derrochan los suecos desde que pisan el escenario!. Ahora un poco de humo, eso no lo esperábamos para acompañar “Deceiver” también de su último disco publicado, IMPERIAL. Joel Ekelöf (aka ‘pelao’) se dirige hacia el público diciendo “you look beautiful tonight, it’s amazing”, y suena un olé en honor a Soen. Continuamos con el groove en tintes funkys de “Lunacy”, del aclamado Lotus de 2019, un temazo coreable de principio a fin donde el carisma del canadiense Cody “Yisus” Ford sale a flote con una contagiosa tremenda sonrisa en el rostro. Para la próxima Joel dice que quiere ver a todos saltando, y así fue, todos saltaron incesablemente a lo largo de “Martyrs” donde el los shaker hicieron también bailar a algunos cuantos. La intro de bajo de “Savia” en las cuerdas de Oleksii “Zlatoya” Kobel hizo brillar hasta las rastas de oro del músico, pasando por atmósferas misteriosas entre luces moradas y verdes para cabecear en crescendo, finalizando con Joel y Cody iluminados al centro del escenario. Para “Lucidity” se encienden las linternas y suena la primera monster ballad de la quinta banda en escena, destacando la participación activa de Lars Åhlund en los teclados, guitarras rítmicas e impecables armonías vocales. Cierran con un grito agudo al unísono entre voz y guitarra y empieza la infaltable pizca de chilenismo en el evento: grita el público yisus, peluca, bigote, pelao, mientras Joel presenta a sus compañeros, mencionando finalmente a la leyenda viva de Soen: Martin López en los tarros. El gran detalle de esto es que en algún lugar de Chile les explicaron a cada uno sus apodos, los conocen perfectamente y les encantan. Abren al hilo “Modesty” con la clásica intro de violines y un groove en la batería que juega constante con los toms del bien equipado drumkit que utilizó López. Cuando más apretados no podían sonar, interpretan “Antagonist”, de esas canciones que te sacan de la calculadora, donde Joel muestra la bandera chilena con el logo de la agrupación pintado. Una de las muchas muestras que hacen que se note que el público chileno quiere muchísimo a la banda. Para cerrar esta extensión del show presentan “Ilussion”, otra power ballad con solo tipo trance que fue una de las más coreadas el martes pasado, y por supuesto, en CL.Prog también. De inmediato Zlatoyar y Cody alzan sus instrumentos a modo de agradecimiento y los músicos se toman un minuto fuera del escenario para cerrar el show. Suena un último olé mientras Yisus mostraba una camiseta de la selección chilena y tras retomar sus puestos, jugar brevemente con el público y unas breves palabras del co-fundador López diciendo lo mágico que es ver a tanta gente reunida, suena en encore con “Lascivious”, otro clásico esperado para cantar a todo pulmón que hace retumbar el venue. Finalmente, cierran con “Lotus”, la guinda de la torta que tuvo una buena cuota de confeti al terminar la canción, desatando la euforia e incluso algunas lágrimas de emoción entre el público. Bajan del escenario a pocos minutos de la medianoche y se da por finalizado el primer volumen del CL.Prog 2023.
Definitivamente fue una jornada redonda, fina, de lujo, apretada y para todos los gustos, llena de poder y maestría musical que ha logrado unir a las distintas generaciones del metal sin prejuicios, dejando una satisfacción absoluta en cuanto a calidad y cantidad. Hoy, Spider Prod acaba de anunciar una segunda edición a realizar este año por lo que estaremos atentos e informando sobre la próxima versión de CL.Prog.
Setlist Desire Of Pain:
Whisper Of Death
Ascension
Memorias Olvidadas
Vértigo
Setlist Mourners Lament:
Slumbers
As Solemn Pan Profaned
Towards Abandonment
We All Be Given
Setlist TesseracT:
Proxy
Retrospect
Resist
Dystopia
Smile
Arrow
Concealing Fate 1-3
Natural Disaster
King
Nocturne
Juno
Setlist Alcest:
Les Jardins De Minuit
Protection
Écailles De Lune pt. 2
Sapphire
Percées De Lumière
Souvenirs D’un Autre Monde
Oiseaux de Proie
Autre Temps
Kodama
Délivrance
Setlist Soen:
Monarch
Deceiver
Lunacy
Martyrs
Savia
Lucidity
Modesty
Antagonist
Illusion
-Encore-
Lascivious
Lotus
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