Botota Fox y Bernardita Ruffinelli en el Centro Arte Alameda: Un espectáculo «la zorra»
11 de agosto 2017.
Por Mackarena León
Fotografías por Rocío Briones.
Ayer viernes 11 de agosto, en el Centro Arte Alameda se celebró la tercera jornada de la primera versión del Santiago Comedy Fest. Las protagonistas fueron, para calentar el ambiente Bernardita Ruffinelli y para finalizar, la gran Botota Fox.
A eso de las 21.30 horas, en un Santiago gélido post lluvia, el ánimo y el calor humano en Alameda 139 auguraban una gran noche, personas de diversas nacionalidades y tendencias se reunieron para presenciar el show de dos grandes del Stand Up chileno, en una fila que llegaba hasta la mismísima calle y que a más de alguno lo hizo rebuscar por una buena ubicación. Fue así, como a las 21.40 aproximadamente, con una sala completamente llena, Bernardita una rubia natural, despampanante y desinhibida subió al escenario. Su inicio estuvo orientado al polémico viral “Dímelo Bonito” y a las minas locas, justificando la particularidad de algunos hombres por fijarse en ese tipo de mujeres, desatando carcajadas por doquier a cada uno de los asistentes. Luego hablo de los minos ricos y la gran fantasía de estar con uno de ellos, finalizando con los gorditos y sus propiedades lascivas para poseer a una mujer, todo esto en un tono de picardía y sarcasmo, con temática orientada a la “evangelización” de las mujeres en la vida moderna y la libertad sexual.
Posterior a una lúdica y divertidísima presentación, hizo ingreso al escenario la transformista más famosa de Chile, la gran Botota Fox, quien sorprendió con un traje de lentejuelas (envidiable) y una cola de caballo digna a la ocasión. Comenzó hablando de ella y sus nuevos gustos, de los pololos que había tenido y también nos relató un trozo de su adolescencia, sin duda una mujer histriónica, diversa y capaz de reírse de ella misma, pudiendo improvisar a la perfección lo interactuando con el público, logrando así, hacer reír a cualquiera.
Definitivamente una noche perfecta para quienes nos gusta el género, ya que nos hizo reír de principio a fin, y a más de alguno sentirse completamente identificado con las situaciones que son parte de nuestra vida cotidiana. En efecto, un show que recomiendo al cien por ciento sí en él se encuentra Ruffinelli, quien personalmente me encantó con su potencia y su espontaneidad. Además de estar en un lugar sin duda bien elegido, agradable, con buena acústica, espacioso, cómodo y acogedor.
Concluyentemente una presentación que logró su objetivo, capear el frío santiaguino y hacernos pasar la mejor tarde de esta semana, por qué ayer era viernes y mi cuerpo lo sabía.
A continuación, nuestra cobertura fotográfica: