Por Carlos Barahona.
En los albores de los noventa, en la isla británica emergió una movida sonora que fue una reacción instintiva a la música grunge estadounidense y al predominio de bandas como Nirvana y Pearl Jam en la escena musical internacional. Las bandas británicas que lideraron este movimiento, como Oasis, Blur, Pulp, Suede y Supergrass, adoptaron un sonido distintivo que fusionaba elementos del rock, el pop y el punk, con un enfoque en las melodías pegajosas y las letras que a menudo hablaban de la vida cotidiana en el Reino Unido. Mundialmente se le conoció como el Britpop.
Este movimiento ayudó a revitalizar el género del pop al introducir melodías pegajosas y accesibles, lo que influyó en muchas bandas y artistas contemporáneos que han incorporado elementos pop en sus obras. También las letras inteligentes y a menudo humorísticas del Britpop inspiraron a músicos a prestar más atención a la escritura de canciones, un enfoque que aún se valora en la música actual. Pero no solo eso, sino que también sirvió para reforzar el orgullo de haber nacido en Gran Bretaña, siendo algo muchas bandas actuales siguen explorando la temática británica en sus letras y estilos musicales.
El Britpop también influyó en la moda y la estética visual de la música, lo que llevó a un interés continuo en la moda británica y la cultura pop. Poleras Fred Perry, chaquetas Harrington, Adidas Samba, son referentes que se mantienen hasta el día de hoy. Y uno de los principales estandartes que se mantienen vigentes con más fuerza que nunca, son los muchachos de Blur. Formada en 1989 en Colchester, Inglaterra, la banda ha estado compuesta por cuatro miembros fundamentales a lo largo de su carrera: Damon Albarn (voz y teclados), Graham Coxon (guitarra y voz), Alex James (bajo) y Dave Rowntree (batería).
Inspirándose en una variedad de influencias musicales que van desde el punk británico hasta el pop artístico de David Bowie. Toda esta mezcolanza se plasma en su álbum debut, Leisure (1991), que incluye éxitos como “She’s So High y «There’s No Other Way». Este disco sentó las bases para su sonido característico y los colocó en la vanguardia del movimiento britpop.
Blur continuó su ascenso con álbumes como Modern Life Is Rubbish (1993), Parklife (1994), y The Great Escape (1995), que los consolidaron como una de las bandas más importantes de la década de 1990. Temas icónicos como «Parklife,» «Girls & Boys,» y «Country House» se convirtieron en himnos de toda una generación.
La rivalidad con Oasis, otra destacada banda britpop, también marcó una época en la música británica. La «Batalla del Britpop» entre Blur y Oasis se hizo famosa en los titulares de los tabloides, y su sencillo «Country House» compitió directamente con «Roll with It» de Oasis en la batalla por el número uno en las listas de éxitos.
A medida que la banda maduraba, su sonido evolucionaba. Blur (1997) fue un punto de inflexión, alejándose del britpop tradicional hacia un enfoque más experimental y ecléctico. El sencillo «Song 2» se convirtió en un éxito global y es un himno del rock alternativo. Tras una pausa, Blur regresó en 2003 con Think Tank, que presentaba un sonido más electrónico e influencias del mundo. Aunque Graham Coxon no participó en todas las grabaciones, este álbum demostró la versatilidad de la banda.
Desde esa fecha en adelante, la banda ha tenido reuniones intermitentes a lo largo de los años, emocionando a los fanáticos con conciertos y festivales. También sus integrantes han explorado diversas facetas. Damon Albarn ha liderado la exitosa banda virtual Gorillaz, mientras que Graham Coxon ha lanzado una serie de aclamados álbumes solistas. El bajista Alex James también ha explorado la música y la escritura, y el baterista Dave Rowntree ha incursionado en la política y la radio.
Pero dos décadas después de su última placa, volvieron a sacar nuevo material, el más maduro e introspectivo The Ballad of Darren, un homenaje a un amigo cercano de la banda y que también marca un punto de inflexión en el que aquellos muchachos de inicios de la última década del siglo XX siguen aquí, aunque con un cúmulo de experiencias en el cuerpo y corazón.
Es en este contexto en el que nos encontramos en la vigilia del festival Fauna Primavera. Esperamos escuchar sus éxitos más emblemáticos y también como suenan en vivo estas canciones nuevas. También porque no, ilusionarse con alguna sorpresa, dada la conexión y conocimiento que Damon tiene de nuestra tierra – famosas han sido sus visitas a lugares como San Pedro de Atacama, por nombrar alguna-.
En resumen, Blur ha dejado una marca indeleble en la música británica y mundial a lo largo de los años. Su influencia, discografía inolvidable y momentos icónicos los han convertido en una de las bandas más queridas de la historia del rock. Con su próximo show en Chile, los fanáticos tendrán la oportunidad de revivir la magia de Blur y seguir en con la guardia en alto, sin importar el paso de los años.
