Instalados en la zona de sacrificio de Quintero, la banda alza la voz y entrega uno de sus trabajos audiovisuales más explosivos del último tiempo.

Con 26 años de trayectoria, este punto de re-descubrimiento artístico del grupo, resulta un brote de novedosas posibilidades para detonar las preocupaciones sociales latentes en la banda. De cara a un proceso de transformación en Chile, y de contingencia mundial sanitaria, Chancho en Piedra entrega un material adelantado, que explota y crece en su propia evolución musical.

Filmado el 17 diciembre de 2019, en el sector de Ventanas, comuna de Puchuncaví, el esperado video clip para el nuevo single Todo Se Me Pasa, ya se encuentra disponible desde este jueves 28 en el canal YouTube oficial del grupo.

Bajo la dirección del músico y realizador, Felo Foncea, el trabajo audiovisual destaca por su alto nivel de imagen y reflexión estética que instala la protesta y el malestar respecto a la lucha de la gente por sus espacios. Medio ambiente eclipsado por la contaminación, en el caso de la locación escogida por los músicos para representar a través del relato audiovisual, la displicencia de las autoridades frente al contexto social y de salud que aqueja al sector de la quinta región.

Con arengas contingentes y conectadas, Chancho en Piedra, experimenta e interviene la aparente conformidad reinante frente a disimiles realidades de estos inestables tiempos: “La canción es una descarga social que está hablando de una manera genérica, y luego va en especifico a hablar de problemáticas sociales en nuestro país, lo que también es un reflejo del mundo. En vez de representar lo mismo que está diciendo la letra, pensamos que necesitábamos un espacio que hablara por nosotros. Llegamos a la conclusión de que no hay mejor escenario para describir la debacle en nuestra sociedad, que una zona de sacrificio. Se nos vino inmediatamente a la mente, el sector de Ventanas y la refinería que está ahí. Y cómo ha destruido el ecosistema, el mar y la playa. Con toda dignidad la zona de Quintero quiere tirar para adelante su balneario, necesita del turismo, entonces esta suerte de “Mordor Industrial” representa las desigualdades sociales. En un contexto así, salir bailando o cantando reggaetón, nos parecía la irreverencia máxima”, comenta Felipe Ilabaca sobre lo realizado. Y agrega: “Lo ecológico va directamente relacionado con el ser humano. Llegó la hora en que nos demos cuenta que lo ecológico y lo social son las misma cosa, la misma demanda. El ser humano no es el dueño de la Tierra, el cambio climático nos está pasando la cuenta en todo el mundo. Todo lo que tenga que ver con el daño a la Tierra, nos afecta directamente a nosotros. El video Todo Se Me Pasa, puede decir eso: estoy súper consciente de lo que pasa en Quintero, pero bailo reggaetón y se me pasa”.

Este video, cuenta además con la participación del cuerpo de baile compuesto por la agrupación de danza Fem Fusión, donde cuatro bailarinas profesionales dan cuenta de las nuevas generaciones y de las preocupaciones de aquellos sin voz que habitan la propuesta artística: “Es un lindo momento frente al caos: todo lo que simboliza esa refinería y zona de sacrificio que hay donde hicimos el video, en el sector de Puchuncaví. Nuestras vestimentas plateadas, y cuerpo de baile representando la canción, contrasta con todo lo feo que le hace al medioambiente ese lugar. La reflexión es concientizar un poco a la gente, de cómo se está acabando con la flora y fauna, y también con la salud de las personas. Es sólo un ejemplo y un caso de miles que hay en el país, de como el poder económico se impone por sobre las demás cosas. Musicalmente, es lo que Chancho en Piedra ha hecho siempre, que es la experimentación musical que fusiona diferentes corrientes. Mezclar el rock, y llevarlo a otros lugares, que quizás algunas personas se sientan un poco incomodos, o les choque del grupo”, explica Toño Corvalán.

Siendo el segundo single y video donde C-Funk participa como nuevo guitarrista y productor musical, Todo Se Me Pasa termina de encender y tomar contextura con una idea clara: el despertar consciente como necesidad humana, para que así, con imágenes vehementes, el espíritu liberador que conlleva la canción, aflore también en este nuevo video clip estrenado, tal como remarca Cristián Moraga, C-Funk: “Es mi canción favorita. Me encanta romper esquemas, ser atrevido. Me encanta tocarle la fibra a la gente y romper las barreras de los que se supone que está bien, y lo que se supone está mal. Ser cuadrado no es para estos tiempos, hay que salirse del marco. Y hay que dejar todas las fobias, todos los prejuicios, y esta canción ayuda a todo eso. Me trago feliz lo que quieran criticar de la canción, porque siento que igual estamos siendo adelantados a nuestro tiempo. Quizás hoy día no se agradezca, pero en el futuro si lo harán. Prefiero ser transgresor, que estar cómodamente en mi sillón haciendo algo que ya está hecho”

De esta forma, Todo Se Me Pasa, se convierte en uno de los video clips nacionales más notables del último tiempo para la escena nacional. Con una propuesta de nivel internacional que alberga los próximos pasos de la popular banda chilena de funk rock. Lalo Ibeas, su histórico frontman, resume así esta visionaria propuesta: “El video quiere demostrar que en un ambiente súper apocalíptico e irrespirable y difícil de vivir, igual puede existir el baile y la música en un video como forma de evasión. Queremos mostrar que por ejemplo, frente a un ambiente catastrófico, siguen siendo los videos con bailarines la distracción para no enfocarse en la solución del problema. Yo creo que esa es la critica que hacemos. En el video no quisimos resaltar textualmente la letra , porque en el fondo de lo que trata este tema, es que está lleno de evasión de la realidad por cruda que esta sea y que con ellas todo se nos pasa. Podemos tomar por dos lados el “todo se me pasa”. Por uno que con esta música, con esta forma de distracción se me pasan las ganas de luchar. Y por otro, que la sensación de lo agobiante y dura que es la vida, se me pasa gracias a la buena energía que da esta música. Por eso es válido interpretar la canción, como una crítica a la liviandad, un llamado a que no se te pasen las ganas de luchar y cambiar lo malo; a pesar de las distracciones. Como también es válido, decir que todo lo malo y la angustia de las preocupaciones, se me pasan con la música que más me gusta. Entonces, hay que hacer un balance de las dos cosas”, resume Lalo Ibeas.