Por Víctor Santibáñez.
La verdad, debo comenzar por decir de lleno que Coco es una de las mejores películas que he visto de Pixar en el último tiempo. En la última década, las producciones de este estudio se vieron plagadas de secuelas y películas que, pese a su buena calidad, me parecen carentes de emocionalidad, por lo que hace bastante no se veía un título original y de peso. ¿Acaso alguien ha podido olvidar los primeros cinco minutos de Up? ¿Cómo, con su música y sin ni una palabra, logró más de algún sollozo en las salas de cine por el año 2009?
Esa carga emotiva es lo que marca un buen largometraje de Pixar: no es solo su originalidad, sino también el cómo nos hace pasar de un estado a otro de forma tan elegante y suave que se nos olvida que vemos una película para niños. Simplemente, la realidad de Pixar va más allá, porque en realidad no son sólo animaciones infantiles, son para la familia, se trata de películas que nos hacen reflexionar y acompañarnos de gente que necesitamos a nuestro lado. Se trata de genios y esta película no es la excepción a su impecable lista de estrenos ya que Coco sobresale y emociona.
Del co-director de títulos como Toy Story 2, Monsters Inc., Buscando a Nemo y director de Toy Story 3, Lee Unkrich, nos llega Coco. Ésta narra la historia del frustrado aspirante a músico Miguel (Anthony Gonzalez), cuya familia veta sus anhelos debido a historias pasadas, las cuales terminan por crear una especie de tabú con respecto a la música en su hogar. Frente a esto, Miguel deberá sobrepasar un par de limites antes de aspirar a hacer lo que ama con la gente que ama.
Coco pone a nuestra disposición un apartado técnico impecable: ciudades, texturas y colores con un sello característico de Pixar, pero con un toque especial. La música es parte esencial de esta cinta, es graciosa y alegre, nos introduce en la historia con una suavidad y calma muy trabajada. Asimismo, hay momentos en los que se encarga de emocionarnos hasta las lágrimas y aun así nos permite reír. De este modo, la música en Coco no es una parte más de la historia, sino que funciona como el hilo conductor de los personajes y el clímax en una trama que no deja nada al azar.
También cabe decir que Coco sabe cómo calzar con la cultura mexicana sin ridiculizar. La película refleja datos bien trabajados y es que, como estudio, Pixar pone lo mejor de ellos en cada proyecto. El producto final nos habla de su responsabilidad y calidad como estudio, pues dejan claro que están lejos de aquél simple objetivo de entretener. Por el contrario, buscan entregar algo distinto, un valor agregado (por así decirlo), un peso diferente que ha sido reconocido por su público mexicano con más de 18 millones de espectadores que ya han visto la película en estas tres semanas que lleva en cartelera.
Coco, es la ultima cinta 100% original de Pixar en lo que queda de la década ya que las cintas que vienen en los próximos años corresponden a secuelas como Los Increíbles 2 (2018), Ralph El Demoledor 2 (2018), Toy Story 4 (2019) y Frozen 2 (2019). Si su objetivo es ver algo más original de los capos de Pixar en la pantalla grande, esta es una oportunidad que no debe dejar pasar.
Coco se estrena a nivel nacional hoy jueves 23 de noviembre. Se trata de una gran cinta familiar que puede ser disfrutada por todo público, por lo que pueden ir desde los más pequeños hasta los abuelos de la casa y la gozarán en todo momento. Para los mas fanáticos, hay un par de los guiños típicos de Pixar durante la película, los que seguramente serán agradecidos.