Matorral en Tocatas Mil: Experiencia multimedia
Centro Cultural GAM, 19 de enero 2017.
Por Gabriela León.
Fotografías por Felipe Morales.
Es jueves 19 de enero y me dispongo a visitar el GAM, a eso de las 21:00 hrs. toca Matorral y quiero conocerlos. El ciclo Tocatas Mil del festival Santiago a Mil, nos trae a esta banda nacional con un espectáculo multimedia imperdible.
La sala A1 nos recibe, una sala que en pocas palabras es hermosa, íntima, está revestida en madera, con una capacidad perfecta para recibir al tipo de bandas como las que vería esta noche. Es un lugar cómodo, tan cómodo como escuchar un disco en el living de tu casa. Es la primera vez que visito las salas del GAM para ver un espectáculo musical y debo decir que quedo muy conforme.
Matorral, es una banda que nace durante el año 2001, conformados, en ese momento, por Felipe Cadenasso, Iván Molina y Gonzalo Planet. El disco que los consagró como banda revelación fue “Voces del Rincón” lanzado durante el año 2003, y que según muchas opiniones de los medios especializados fue uno de los debut más importantes para el rock chileno.
Recuerdo haber visto información de ellos cuando iba a ver bandas que nacieron de la misma camada que los chicos de Matorral, bandas como The Ganjas y Perrosky, entre otros. Era una banda que aun así, no me había dado el tiempo de escuchar y que decreté que ayer sería un buen momento para hacerlo.
Los chicos de Matorral entran en escena, cuatros chicos tímidos, cuatro chicos que tomaron sus instrumentos y se dejaron llevar. La iluminación bajó y comenzaron los primeros acordes de “Boleta de Cambio”, canción que también abre su último álbum “Gabriel” (lindo nombre).
Fue en ese momento en que comenzó el viaje. Debo destacar que los chicos de Andes Empire ayer se lucieron, apoyaron todo el recital con la proyección de contenido multimedia, lo que nos hizo viajar. Imágenes que estaban tan bien integradas con los sonidos de Matorral, que lograron acoplarse al nivel que pasado los primeros minutos del recital, ya nos encontrábamos todos viajando con ellos. En un momento estábamos en las montañas, para saltar a un túnel eterno y terminar en la superficie de alguna estrella. Definitivamente, es un acierto la inclusión de este tipo de contenido en los conciertos, es una experiencia nueva, una práctica que no solo se trata de escuchar sonidos nuevos, si no de ser parte de lo que la música quiere proyectar.
Como les comenté, en un par de líneas hacia atrás, Matorral para mí no era tan desconocido, siempre estuvieron presentes en mi cabeza y en los grupos nacionales que hace rato sonaban en ese entonces. Me recordó mis viajes a la SCD en el Metrobus 81, cuando bajaba música por Soulseek y las grababa en algún cd virgen que encontraba en algún cajón.
Matorral tiene un toque nostálgico, su música ayer me llevó como medio de transporte hace casi 15 años atrás, cuando con mis amigas íbamos a escuchar música nueva. Música que quizás no entendíamos pero que gozábamos como cualquiera.
La música de Matorral, es diferente, refinada, madura y elegante, definitivamente no es para cualquier oído. Es un gusto adquirido, de esos gustos que te toman y no te sueltan más. Canciones como “Secuencia”, “Boleta de Cambio” entran en tu cabeza y no te sueltan en un rato. Definitivamente, fue un agrado escucharlo por primera vez y espero (y estoy segura) de que no será la última.
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