¿Cómo te sentirías si un día eres el guitarrista y vocalista de una banda de rock y al otro despiertas y te das cuenta que ya eres padre, tienes 40 años y todo lo sucedido anteriormente vive en ti como un vil recuerdo?
Esta es la gran historia que se plantea en “Ordinary World”, cinta estrenada durante el 2016 y dirigida por Lee Kirck, la cual narra la historia de Perry Miller (interpretado de gran forma por Billie Joe Armstrong, el carismático vocalista de Green Day) quien en 1995 se está presentando en la ciudad de Nueva York junto a su banda de punk The Skunks. Veinte años después, la banda se ha separado y Perry deberá aprender a aceptar su nueva vida lejos del rock, en donde tendrá que lidiar con una esposa que trabaja duramente como abogada, con los cuidados de su talentosa hija Salomé y de su hijo recién nacido.
¿Todo suena familiar?
Quien no ha tenido el sueño de ser una estrella de rock, de querer estar por un minuto sobre el escenario y ser aclamado por miles casi como un Dios y llevar a cabo todo el sueño del rockero empedernido. Imagínate que ya viviste esa realidad, pero que ahora sientes que vives atrapado en la monotonía de la vida familiar.
Todo esto es lo que ocurre en esta entretenida comedia, en donde nuestro héroe Perry, quien trabaja descuidadamente en una ferretería, siente que todo el mundo ha olvidado su cumpleaños número 40 y en despecho a eso decide convocar a sus antiguos ex compañeros de banda a participar de una increíble y alocada fiesta en un hotel de lujo, en donde es participe de hasta una reunión con una ex novia, al mismo tiempo que su hija está a momentos de vivir uno de los instantes más importantes de su vida al presentarse en su primer show de talentos escolar.
Una comedia ligera en donde sorprende la interpretación de Bille Joe como un hombre común que vive una lucha interna constante entre su pasado punk y el ajuste a una realidad de adulto que le cuesta aceptar.