Por Jorge Tello.
El Festival In-Edit, no para de dejarnos buen gusto en el paladar cerebral, porque hay material que sin duda transciende nuestros sentidos, mostrándonos una realidad paralela. Ayer cuando veía Raving Irán, pensaba en el lugar donde estoy parado y sentía lo afortunado que somos, a pesar de vivir en una sociedad marcada por la desigualdad, una de las más grande según la OCDE, pero al ver lo que sucede en Irán y en el medio oriente en general sobrepasa cualquier límite de tolerancia y comprensión, haciéndonos sentir que al menos acá aún queda la esperanza de avanzar y mejorar, algo que en Irán, ni siquiera está dentro de la imaginación de la mayoría, acostumbrados a un sistema de vida que coarta toda expresión artística entre otras cosas, dejando a las personas completamente sumisas, adaptadas y congeladas con lo que viven a diario, donde realmente se pasan a llevar un sin fin de derechos.
No es que quiera conformarme ni alegrarme con lo que hoy en día sucede en Chile o en accidente, pero no hay lugar a dudas que estamos, gracias a su Alá, Dios, destino o sentido común, años luz de lo que sucede allí. Raving Irán es un documental con cámara en mano que nos muestra la vida de dos jóvenes Dj’s que prácticamente desde la clandestinidad, hacen lo que más les gusta pero que en su país está totalmente prohibido, algo tan simple y cotidiano para nosotros, como ver a alguien pinchando discos, resulta prácticamente un crimen, ya que está prohibido todo «lo occidental». Hablar inglés, la música, mostrar escote o la espalda de una mujer en una imagen, aunque sea la portada de un disco, ni mucho menos que una mujer sea la cantante principal en una agrupación o simplemente en una canción.
Todo es underground, y Susanne Regina Meures, la directora del film lo muestra muy claramente, lo que sin dudas fue una hazaña, provocando hoy en día tener completamente prohibido el ingreso nuevamente a Irán. Los dos protagonistas son sencillamente el reflejo del cambio de mentalidad que significa la información, tener un computador con internet es una herramienta que no podemos medir, y gracias a ello, sonidos, noticias y realidades completamente distintas, es lo que despertó las mentes de Anoosh y Arash.
Fiestas de música electrónica que son realizadas a escondidas, en un anonimato que es mantenido con invitaciones de boca a boca, para los amigos y amigos de los amigos, en donde la policía es el enemigo principal si son descubiertos, arriesgando incluso cárcel.
Una lucha que debe ser mostrada al mundo y así poder debilitar un régimen que transgrede derechos humanos y mantiene a sus habitantes como muñecos de cera ahogados por el miedo, es lo que éste film grita a los cuatro vientos a través de los Dj’s, donde la voluntad, constancia y por sobre amor por lo que se hace, puede ser la mejor arma para la lucha.
Resumen: Imperdible.