Richard Ashcroft en Chile: talento puro
Teatro Caupolicán, 20 de octubre 2016.
Por Pamela Cabello L.
Fotografías por Francisco Aguilar A.
Pasado las 21:00 Horas, en uno de los lugares preferidos por los melómanos nacionales, el bello Teatro Caupolicán, termina la larga espera de los que disfrutan de la buena música, Richard Ashcroft se presenta en nuestro país. Para quienes han seguido la carrera de la mítica banda The Verve, era imperante poder tener la oportunidad de presenciar este show, por lo que el teatro se colmó de almas noventeras, ansiosas de escuchar música de la buena. En un sencillo escenario, con dos grandes letras de fondo “RA”, aparece esta persona de contextura bastante delgada, pero que sin embargo, es dueño de una potente voz. Acompañado de sus músicos, que por cierto, evidencian una gran calidad, comienza la fiesta. Al observar los rostros de los asistentes, se evidencia una gran emoción, que claramente tiene mucho que ver con el carisma indiscutible del artista.
Como mencioné anteriormente, Ashcroft, es dueño de una tremenda voz, que sin duda, se potencia enormemente con esa conexión constante con el público. El británico demostró su alegría a través de sus movimientos, de su baile, del completo lenguaje corporal.
Hicimos un viaje en el tiempo, que pareció estar detenido, al comenzar. Escuchamos temas de su trabajo como solista y también himnos de “The Verve”, abrieron los fuegos temas como “Out of my body” “Space & Time” y “Break the Night”. Llama la atención la maestría del artista al tener el completo control de la banda, aparte de interpretar los temas con su guitarra, hace y deshace los tiempos, incrementos y disminuciones de la potencia de los sonidos, simplemente, un tremendo músico.
Un momento muy especial del show, fue cuando Ashcroft comienza a pasar sus manos por su cuerpo, el suelo, saca sus zapatos y calcetines, quedando descalzo, queriendo conectarse completamente con el lugar que estaba pisando, cosa que sin duda logró con creces.
Nuestros sentidos siguen disfrutando de excelente música, suenan temas como “Science of silence”, “New York” y “Lucky Man”, los que nos indican que se vienen cosas bellas. De pronto, desaparece del escenario el gran artista y su banda, lo que nos hace reaccionar y seguir pidiendo más. Luego de entonar su nombre a gritos, aparece en el escenario Ashcroft y su guitarra electroacústica, lo que nos lleva a la intimidad.
Esto simplemente es mágico, un hombre dueño de una potente y particular voz, abrazado a una guitarra, logró que nos transportáramos en el tiempo y llenáramos nuestras almas de nostalgia y a la ves alegría, al escuchar “The Drugs Don`t Work” y “Hold On”.
Lo que presenciamos, simplemente, fue mágico y debía ser culminado de una manera magistral, y así fue. Sigue Ashcroft con su guitarra, comienzan a sonar los acordes de la bella e icónica “Bitter Sweet Simphony” y ya con la banda completa de vuelta, encienden con potencia este hermoso tema. Es así como se da término a uno de los mejores conciertos del año 2016, calidad musical, voz potente, carisma y conexión con quienes disfrutamos de su música.
Setlist:
Out of My Body
Space and Time
Break the Night With Colour
They Don’t Own Me
This Is How It Feels
Music Is Power
Sonnet
Science of Silence
These People
New York
Lucky Man
Encore:
A Song For The Lovers
History
C’Mon People We’re Making It Now
Check The Meaning
The Drugs Don’t Work
Bitter Sweet Symphony
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