Banda invitada: Nuvian.
26 de abril 2025.
Por Rodolfo Galleguillos.
Fotografías por Sebastián Umaña.
Portada Francisco Aguilar A.
El 2025 se está consolidando como un año de grandes debuts en vivo, ya que la llamada capital mundial del rock está cumpliendo sus anheladas deudas con todos los fanáticos de nicho. En este turno The Pineapple Thief pudo llegar finalmente a Santiago después de dos intentos fallidos: la tercera era la vencida. El grupo inglés tocó un setlist fundamentalmente inspirado en su último trabajo del 2024 It Leads to This, con algunos cortes de sus otros discos manteniendo la esencia del aclamado periodo iniciado el 2016 con la llegada del virtuoso Gavin Harrison a las baterías.
La velada partió con el grupo local Nuvian, a cargo de dos bajistas Matías Salas y Gabriel Contreras, recordando la propuesta contemporánea que tiene la banda The Omnific bajo la misma fórmula. Si bien en esta ocasión no tocaron con baterista, el formato dúo pudo dar rienda suelta a su virtuosismo para calentar motores al plato fuerte, interpretando canciones de su disco debut homónimo del 2024 con temas como “Orquídeas” y “Sombras”. De la periferia de Santiago al mundo, el grupo mantuvo una dinámica que funcionó para los asistentes.
A las 21.00 en punto sale a escena el quinteto inglés con las canciones “The Frost” e “In Exile”, que inmediatamente forjaron el ambiente a uno de emocionalidad etérea, característico de la paleta sonora que Bruce Soord ha venido trabajando desde sus inicios, al servicio de experiencias cinematográficas. Los asistentes celebraron la llegada al fin de la banda, y comenzaron a cantar sus canciones. Como es habitual en este tipo de grupos, hubo solicitud de no grabar con celulares el show, por lo que se percibió mayor atención de parte de la fanaticada a lo que ocurría en el escenario.
Las canciones fueron sonando con completa pulcridad, y la química del grupo siempre se mantuvo estable. “Versions of The Truth” y “Every Trace of Us” fueron la antesala a uno de los momentos más destacados de la noche: la ejecución de “White Mist”, canción del alabado Disollusion del 2018 y la que siempre es lucida como una pieza clave en el repertorio de la banda. El apoyo del guitarrista en vivo Beren Matthews fue clave en todo momento. En la mitad del extenso show los cuatro miembros estables del grupo dieron un momento más íntimo tocando “Threatening War”, “Barely breathing” y “Snowdrops” en formato acústico, a modo de distender el habitual sonido eléctrico de la banda. Fue un cariño para los oídos.
Gavin Harrison sin duda siempre se merece una mención que destaque su desempeño, ya que su aclamada técnica y estilo en las baquetas estuvo una vez más impecable. Parecía que tocaba sin esfuerzo; era la batería Sonor la que transpiraba al recibir cada golpe de sus baquetas. En las canciones “It Leads to This” y “Give it Back” quedó claro por qué nunca decepciona.
El segmento final de la presentación tuvo a “Fend for Yourself”, “Alone at Sea” y “The final Things of my mind” siendo coreada por el satisfecho público, que ya había sido reconocido por Soord -y una vez más por una banda internacional – como el mejor del mundo. Chile sigue quedando a la altura en reconocer su fanatismo, ya que en este rincón del mundo vivir sin música sigue siendo inconcebible para muchos.
Setlist:
The Frost
In Exile
Demons
Put It Right
Our Mire
Versions of the Truth
Every Trace of Us
White Mist
All That’s Left
Now It’s Yours
Threatening War (Acoustic)
Barely Breathing (Acoustic)
Snowdrops (Acoustic)
Rubicon
To Forget
It Leads to This
Give It Back
Fend for Yourself
Alone at Sea
The Final Thing on My Mind