Por Paulo Domic.
A lo largo de 40 aos de trayectoria que cumple este 2025, Marko Hietala se he consolidado como uno de los personajes más importantes del heavy metal, Nació el 14 de enero de 1966 en Finlandia y, si bien es reconocido por ser el bajista y vocalista de la banda de metal sinfónico Nightwish, donde estuvo desde 2001 hasta 2021, a los 19 años ya estaba formando Tarot, su primera banda y un año después editaba su primer álbum.
A lo largo de su carrera, Hietala ha sido aclamado por su distintiva voz y su habilidad musical, aportando no solo en el aspecto instrumental sino también en la composición de varias canciones. Su influencia en el género del heavy metal ha sido significativa, contribuyendo al éxito internacional de Nightwish y solidificando su reputación como un músico versátil y talentoso.
Además de su carrera musical, Marko Hietala también ha participado en varios proyectos en solitario y colaboraciones con otros artistas, demostrando su amplia gama de talentos y su pasión por la música. Hace poco estuvo en Chile con la diva Anneke van Giersbergen en un espectáculo acústico inolvidable y este 26 de mayo regresa a Chile con otra voz femenina con la que hizo historia: Tarja Turunen.
Tuvimos la oportunidad de conversar con él en el marco del inminente lanzamiento de su nuevo disco como solista titulado Roses from the Deep, el cual ya esta disponible. Desde España, su base de invierno y algo adolorido de la espalda, igualmente nos recibió virtualmente con mucha amabilidad durante su reposo. A continuación, les compartimos sus respuestas a nuestras preguntas.
¿Te escapas a España para huir del frío finlandés?
Sí, con mi esposa y mi bebé. Decidimos tener este lugar aquí en la época en que me iba de todo, cuando escapé del mundo entero. La mayoría de la gente piensa que dejé Nightwish, pero lo dejé todo y vine aquí para estar totalmente libre de todo tipo de obligaciones. Porque la depresión y la ansiedad se habían vuelto realmente malas. Era una constante supervivencia día a día contra los pensamientos negros. Ahora, los tiempos oscuros han quedado atrás, al menos por ahora.
Con todo esos que te tocó vivir, y ya con 59 años caminando por esta tierra, ¿cuál es tu filosofía y desde qué perspectiva sostienes tu punto de vista en la actualidad?
Probablemente sea más o menos la misma de siempre. A la gente le asusta verse a sí misma. Y siento que el miedo es el enemigo de todas las decisiones racionales o de todas las decisiones emocionales adecuadas. Es muy destructivo. Te impide decir cosas honestas porque tienes miedo de que la gente no las entienda o las malinterpreten. Tienes miedo de las cosas que dicen de ti. Y toda esta política del miedo es conveniente para algunso pocos que, a través de nuestros temores, perpetúan el escaso espacio para las minorías sexuales, los colores de piel, etc. Son demonizadas porque es seguro para que todo se mantenga como siempre. El miedo es el enemigo. Te impide ser sincero y honesto.
Pero aun así, tiene que haber algo de coraje en todo esto. Yo hablo de lo que siento que tengo que hablar, aunque peque de ser brutalmente honesto. Eso le llega mejor le llega a quienes me oyen. ¿Y qué pierdo? No pierdo nada al ser abierto. Al rendirme, ahí sí que pierdo
¿Qué intentas reflejar en tu próximo álbum?
Bueno, es un poco difícil de definir, pero creo que fue como si las cosas simplemente empezaran a encajar. Me diagnosticaron, dieron terapia y medicación y las cosas comenzaron a aclararse. Y entonces empecé a escribir cosas y a desenterrar el material antiguo que tenía guardado. Le mostré algunas piezas a los miembros de mi banda y les gustó. Así iniciamos el trabajo creativo. Al mismo tiempo, Tarja me llamó para comenzar a tocar con nuestras bandas juntas y me propuso que tocáramos El Fantasma de la Ópera de Nightwish. Eso fue muy emocionante para mí, hacerlo después de tantos años. Desde ahí nació la idea de que la canción “Left on Mars” fuera un dueto con ella.
En síntesis, este álbum emerge desde una serie de hechos que se fueron dando naturalmente y que retratan lo que ha pasado en mi vida en los últimos años.
¿Qué tipo de influencias plasmas en este trabajo?
Tendemos a incluir rock clásico, luego nos deslizamos hacia el lado metal y después hacia el progresivo. Tengo músicos bastante versátiles como compañeros de banda. Entonces surge algo así como un “hard prog” porque combina muchas cosas. Y funcionó perfectamente, creo.
Has tenido la suerte de hacer música y compartir escenarios con Tarja y Anneke, dos de las voces femeninas más importantes en la historia del metal.
Imagínate… ambas son icónicas. Anneke es la definición de lo melódico, Tarja la soprano que remeció el mundo con la mezcla de metal. Ha sido genial trabajar con ambas. Soy consciente que, de mi parte, en un momento fui el “chico nuevo” de la banda que sostenía que, si seguíamos en esa misma dirección, la banda moriría. Eso terminó sacándola del grupo. Pero eso nunca fue personal. Fue movido por el miedo y los malentendidos. Cuando nos volvimos a ver en la Navidad de 2017, pudimos hablar sobre esto. Libres de los representantes, rencillas internas, la prensa vuelta loca y todo eso. Y me di cuenta de que había perdido a una amiga. Pero en esa oportunidad, pudimos conversar desde el corazón y desde entonces hemos mantenido una excelente relación.
Eso también ha llamado a las especulaciones y a los vendedores de humo que lanzan rumores sobre una posible reunión de Nightwish… ¿Es eso imposible de que ocurra?
No por mi parte, yo lo haría. Depende de lo que ocurra y del trato al que lleguemos. Pero no me quita el sueño. Ahora estoy viviendo un día a la vez. Por ahora estoy con mi banda y luego tengo planes para regresar con Tarot. En este momento debo cuidarme a mi mismo. De todas formas, yo tengo la sensación de que Tuomas Holopainen es quien ahora está llegando a un límite y va a necesitar salirse de todo por un tiempo también. Probablemente sea un tipo demasiado amable para este negocio, que es una jungla llena de gente que quiere estafarte.
¿Cómo visualizas tus próximos diez años?
Mis objetivos artísticos son bastante simples: renovar mi forma de pensar y de cómo hacer música, escribir algo bueno desde nuevos ángulos y hacer buenos shows con la banda que tengan tanta fuerza que nadie se vaya sin una sonrisa en la cara y un puño hacia el cielo.
No pienso en conquistar el mundo. Por lo demás, todavía tengo niños pequeños, así que me gustaría ser básicamente un buen padre para mi familia. Algo que es como un dilema constante cada vez que tienes que, por ejemplo, irte de gira. Pero hay que hacer ambas cosas. Sin los espectáculos y la música, la familia no tendría comida.
Pronto vienes a Latinoamérica. ¿Estás de acuerdo con eso de que aquí las audiencias tienen algo especial?
En el caso del público latino, siempre se da el caso de que la gente está más en contacto con sus sentimientos. No son tan reservados ni tan orientados a la racionalidad como los europeos del norte o algo por el estilo. O los norteamericanos.Así que cuanta más gente está en contacto con ese tipo de cosas, más se involucran en el mundo de la fiesta cuando hay un buen espectáculo en marcha. Así que sí, el público sudamericano es simplemente genial.
Pero tengo que decir lo mismo también sobre la antigua Europa del Este. Cuando cayó la Cortina de Hierro y comenzaron a hacer espectáculos allí, esta gente también se volvió realmente salvaje.
Manda un mensaje final para nuestros lectores
Me gustaría mucho invitar a la gente a escuchar mi nuevo álbum álbum y a venir a los shows porque, bueno, si bien no estoy calificado para juzgar mi propio trabajo, hasta ahora, por lo que he escuchado de los periodistas y de la gente que ha tenido acceso a él,son bastante unánimes en decir que está realmente genial. Así que me siento bien. Estoy comenzando a creérmelo yo también. Siempre es bueno escucharlo desde afuera.