Artista invitado: Tim Kasher
4 dr abril 2024.
Por Sebastián Allende.
Fotografías por Javier Martínez.
Cuenta la leyenda que hubo un tiempo en que en Chile las presentaciones de agrupaciones extranjeras eran limitadas y la sola idea de ver algún show de alguna banda que uno consideraba de culto sonaba casi como una travesía. Este jueves pasado, 4 de abril del 2024, fue uno de esos días que no creíamos que serían posibles. Vivimos el debut de la banda de post hardcore Thursday, una de esas visitas que se pensaban improbables, pero que, gracias a una carrera cimentada en más de 25 años de vida, el esfuerzo también de la producción y una fanaticada que a pesar de los años siente a esta banda como uno de los suyos, nos llevaría a esta velada con bastante entusiasmo y que estaríamos a minutos de presenciar.
Sala Metrónomo sería el escenario escogido para convivir las emociones y los sentimientos de los cientos de fans que, desde temprano, se hicieron presentes para llenar este recinto. Es que la entrega explosiva que ofrecen los sonidos de los norteamericanos comandados por Geoff Rickly serían el plato estelar de una noche que sería vivida a full por cada uno de los fanáticos presentes. Los que se conectarían preliminarmente con la guitarra y la voz de Tim Kasher, músico encargado de proporcionar los primeros acordes de una noche que prometía harta emoción.
Kasher subiría a escena envuelto solamente de su guitarra acústica para entregarnos parte de lo mejor de su carrera junto a las bandas Cursive y The Good Life. Llegarían “From the Hips”, “I Don’t Think About You”, “Lovers Need Lawyers” y “Life Coach”, entre otras para entregarnos un poco de miel para los oídos, gracias a la voz de Tim y canciones que si bien no contienen la potencia de la banda estelar de la jornada, eran entonadas por varios de los presentes, lo que demostraba que este músico, no era un desconocido para los que ya se encontraban instalados en las primeras filas de Metrónomo para agarrar así la mejor ubicación posible y no perder ningún detalle.
Tras “Album of the Year” y “Art Is Hard” de Cursive los aplausos generalizados del respetable despedirían a Tim Kasher, quien nos demostró que con solo una guitarra, buenas canciones y una buena voz, se puede emocionar y hacer vibrar a muchos, convirtiéndose así, en el preludio ideal para dejar al recinto en paz para que los cientos de fanáticos que ya repletaban, y seguían llegando sobre la hora, a la sala.
Cuando el reloj dejaba de marcar las 21:00 hrs y la espera comenzaba a hacerse eterna para los presentes, comienzan a subir uno por uno los integrantes de Thursday. Geoff Rickly en voz, secundado por Steve Pedulla y Norman Brannon en las guitarras, y la gran base melódica conformada por Stuart Richardson en el bajo y Tucker Rule en la batería nos darían el saludo de rigor y a lo suyo: Cae como una gran bomba que retumba por los oídos “At This Velocity” y comienza a arder Sala Metrónomo. No es casualidad que eligieran esta canción para partir este show, ya que funciona de manera perfecta para explicar lo que es esta banda, un cúmulo de sonidos y emociones que se intensificarían con “Division St.” canción perteneciente al disco War All The Time (2003), parte fundamental de la discográfica de la banda.
Los sonidos que no se detienen pero que si nos dan un poco de descanso, gracias a la transversalidad que posee Thursday al darnos una tremenda interpretación de “Signals Over the Air”, canción que puede sonar un poco más radial del catálogo de los muchachos de Nueva Jersey es la introducción y el punto de inflexión necesaria para lo que vendría con “Cross Out the Eyes”, una de las más coreadas de la jornada y que volvió a hacer estallarlo todo. Pueden llamarlo post-hardcore, emo, screamo, como quieran, pero esta es música que se transforma en un elixir para todos, desde lo más lejos cerca de la barra e incluso para los que están en primera fila, que parecieran que estuvieran en las trincheras y que también son los protagonistas de esta jornada, ya que no es solo los sonidos y los músicos los que hacen un buen show, sino que el ambiente, la buena onda y el respeto que se siente y hace presente, influye en que todos disfrutemos.
Una sonrisa en la cara de Geoff nos daría la razón en todo, este es un concierto de agitación de multitudes, quienes se suben al escenario, lo abrazan, le demuestran admiración y respeto para después saltar y emprender el vuelo como palomas libres, así tal como el logo característico de Thursday y como si fueran parte de la letra “Cross Out the Eyes”, que dice: “Nosotros podemos levantarnos por las alas”. La masacre se hace continua con “Jet Black New Year” pero toma pausa con “This Song Brought to You by a Falling Bomb”, sin lugar a dudas uno de los momentos más emotivos de la noche, gracias a la interpretación de Rickly junto al sonido de un piano de esta bella canción del War All The Time, que si bien está presente en un disco que habla su título de guerra, no es sobre bandos enemigos o naciones que se tratan de poner por una tras otra, sino que nos habla de las distintas guerras que tenemos en la vida, en el amor, en el trabajo, porque cada uno vive su propia procesión y hay que respetarlo y siempre intentar dar lo mejor de nosotros. “This Song Brought to You by a Falling Bomb” fue la muestra de un Geoff sereno que nos reveló que su voz se encuentra semi perfecta como en sus mejores tiempos, a pesar de los gritos y los devanes del tiempo.
Sigue la música con “Fast to the End”, parte de los sonidos distintivos de la última época sonora que fue el disco No Division (2011), para posteriormente dar pie a una triada de canciones que por poco hicieron incendiar la Sala Metrónomo: “Autobiography of a Nation”, “Standing on the Edge of Summer” y “Understanding in a Car Crash“, parte del santo grial de Thursday conocido como Full Collapse. Tremendas canciones para botar todo, se va la pena, se va la angustia, se va todo gracias a una canción y es así el efecto y el poder que tiene la música y – vale citar- tal como lo afirma la Real Academia Española que la música es “el arte de combinar los sonidos de la voz humana o de los instrumentos, o de unos y otros a la vez, de suerte que produzcan deleite, conmoviendo la sensibilidad, ya sea alegre, y/o tristemente” y es verdad, para los que amamos este tipo de expresión de arte que nos acompaña en distintas etapas de la vida y que suele ir directamente relacionado con las emociones, la música se siente y con todo, tal como se demuestra este jueves de abril.
Tras una breve pausa para el descanso de la agrupación, la guerra no termina y las bombas sonoras seguirían con “For the Workforce, Drowning”, “The Other Side of the Crash/Over and Out (of Control)” y el cierre con el climax que te entrega una epica versión de “War All the Time”, en donde los retumbes de la batería de Tucker Rule hacen estremecer y conectar los corazones de cada uno que dijo presente en esta jornada que se suma a muchas en donde el amor de un público que esperó tanto por esta gran banda, que lo dio todo en el escenario y que se fue con un premio, una nueva familia que agradece su música que pueden parecer y sonar como bombas y misiles, pero que alimenta el alma.
Setlist Tim Kasher:
From the Hips
I Don’t Think About You
Lovers Need Lawyers
Life Coach
The Recluse
Album of the Year
Art Is Hard
Setlist Thursday:
At This Velocity
Division St.
Signals Over the Air
Cross Out the Eyes
Jet Black New Year
This Song Brought to You by a Falling Bomb
Fast to the End
Autobiography of a Nation
Standing on the Edge of Summer
Understanding in a Car Crash
Encore:
For the Workforce, Drowning
The Other Side of the Crash/Over and Out (of Control)
War All the Time
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